Las Tumbas.

No me gustan las tumbas,ni ir a visitarlas,ni hablar frente a ellas como si quisieramos que nos oigan allá abajo. Adoración por las tumbas, no se, pero...Sí creo que ellos, los que se fueron, siguen espiritualmente en otro lugar. Creo que si dirigimos a ellos nuestros pensamientos sí nos los captan, mas ya eso de recibir respuestas, pues solo dira que si el que haya creído vivirlo,entonces, ¿ por que ocupamos ir allá a visitar a los difuntos?, vamos a visitar cuerpos enterrados en el estado que tu imagines en el que están, no voy a escribirlo. Pero mis recuerdos son de personas vivas, tal como eran, y si pienso en ellos pienso en su escencia, su alma,a la que creo incorpórea o etéreamente figurada como fueron en vida. Si entonces esos espíritus, mas libres y vagabundos que nosotros, andan por donde quieren, me dirijo a ellos en mejores escenarios, para que vengan conmigo a compartirlo, cuando hay un lindo paisaje, cuando escucho música o la interpreto, cuando recuerdo sus sitios preferidos, la comida que disfrutaban, las novedades que les quiero comentar.
Sepulcros blanqueados, se refirió Jesús, "estaba bonito el panteón, lleno de flores". Ahí solo hay constancia de la muerte, no de la resurección, del resurgir del alma, de su transcurso hacia el lugar desconocido de luz al que quizá creamos que nos vamos a volver a ver. Igual de comprobada está cualquier teoría de la vida despues de la muerte,ninguna está confirmada. Así que prefiero decirles: mira abuelito lo que escribí, mira madre, lo que es esto del internet;lo ves,amigo mío, tengo una hija...prefiero invitarlos a mi vida, a visitar unas tumbas. Solo fuí, porque a ella, le gustaban las flores en las tumbas, y la suya, tenía que tenerlas. A mi, ponganme una piedra encima, y olvidense que ahí quedo este cuerpo, mas jamás se olviden de mi alma.Hasta volver a vernos, mis difuntos.