jueves, 30 de junio de 2011

Los principios del final personal.

Pienso, que cuando estamos viejos estorbamos y creamos problemas con la familia, porque, como los hemos impulsado, cada uno a ido a ocuparse de sus cosas, su vida y sus familias, y están haciendo lo que queríamos que hicieran, tener una vida completa en lo posible...y entonces, resulta que en su vida, no cupimos nosotros, han hecho su círculo familiar cada uno de ellos y no hay un eslabón que nos una a ninguno de esos círculos porque nosotros aún tenemos el nuestro, incompleto, porque se le han ido saliendo las piezas, hijos, pareja, negocios quizá... y no se si será para fortuna o desgracia, pero nadie nos dice nada....solo sabemos que uno de ellos, los hijos, se encarga de nosotros, y los otros nos visitan, no sabemos si por amor, por cumplir un compromiso o porque no les dejaron otra salida. Pero se llegan a fastidiar, a cansar y en lugar de hacer un reacomodo dialogado, se explota "yo ya me cansé", y cada uno en la comodidad de saber que otro ya se ha encargado del paquete y no tendrá que cargar con el, se olvida de cooperar.
¿Vivimos horas extras? ¿ debíamos de habernos ido ya? que dolor, saber que se está de mas, que resultamos piezas sobrantes...y que quizá la muerte es la única salida, porque no queremos tampoco, facilitar soluciones. Como seguimos siendo tan suficientes, tan fuertes, no necesitamos ( aunque estemos mintiendo) no necesitamos a nadie que nos atienda, pero, sin alguien que nos atienda nos dejamos de atender y empezamos a secarnos.....¿ cual es la salida? ¿cual es la salida? la muerte, nada mas la muerte.......Señor, danos tu luz, para solucionar lo que nos asfixia, para no abandonar a aquel que nunca nos abandonó, que dejó su felicidad en el camino, pero siempre estuvo a cargo de nosotros.....ILUMINAME, DIOS.

2 comentarios:

saiz dijo...

Hola,Blanca,a pesar de los problemas de acceso desde tu perfil, he venido por aquí y leído tus últimas entradas. Sobre si estamos viviendo de más, ¿quién sabe? Ni elegimos nacer ni elegimos morir. Ni venimos voluntariamente ni nos iremos cuando queramos (normalmente). Así que, ya que somos unos mandados, no tiene mucho sentido darle más vueltas al asunto. En todo caso tratemos de, además de alargar la vida, "ensancharla".

Blanca dijo...

buen punto Saiz, gracias por venir.